Consciente de que, al igual que del fuego no puede surgir agua, es casi imposible que un mal gobierno pueda presentar buenas propuestas, la Unión Europea acaba de rechazar la idea de implantar controladores de bajo coste, impulsada por el ministro español de Fomento, Pepiño Blanco.
En plena refriega de Blanco con el colectivo de controladores, el documento por el cual se armoniza la implantación europea de los Afis, elaborado por la Agencia Europea para la Seguridad de la Navegación Aérea (Eurocontrol) y consensuado por los países de toda Europa, se muestra categórico al sostener que no se puede instalar este mecanismo en ninguno de los aeropuertos en los que Fomento tiene pensado sustituir a los controladores.
Para desgracia del gobierno español de Zapatero, al que, a pesar de ostentar la presidencia rotatoria, Europa no le acepta ni una sóla iniciativa, el manual europeo de instalación de los Afis, que será aprobado el próximo martes rechaza de forma tajante las intenciones del ministro de Fomento de incluir en varios aeropuertos españoles el servicio de información de vuelo en aeródromos.
Para evitar la humillación, en las negociaciones sobre el documento, España intentó eliminar la salvaguarda que cuestiona el plan de Fomento. Al no conseguirlo, se decantó por no hacer más ruido sobre este asunto para no aparecer como país perdedor. Eso sí, José Blanco puede optar por no cumplir el mandato comunitario, ya que hasta que entre en vigor el Cielo Único de la UE son los Estados los que tienen la soberanía sobre el control aéreo.
Los "Afis" (servicio de información de vuelos en los aeródromos) son un sistema automático aprobado por la Autoridad Internacional de Aviación Civil (OACI) que, supervisado por un técnico, proporciona a los pilotos la información suficiente para que ellos mismos coordinen sus aterrizajes o despegues en la pista que consideren más oportuna. El técnico da instrucciones a los pilotos en base a los parámetros que muestra el sistema.
El objetivo final del Afis es suprimir puestos de controladores aéreos y sustituirlos por este sistema.
En plena refriega de Blanco con el colectivo de controladores, el documento por el cual se armoniza la implantación europea de los Afis, elaborado por la Agencia Europea para la Seguridad de la Navegación Aérea (Eurocontrol) y consensuado por los países de toda Europa, se muestra categórico al sostener que no se puede instalar este mecanismo en ninguno de los aeropuertos en los que Fomento tiene pensado sustituir a los controladores.
Para desgracia del gobierno español de Zapatero, al que, a pesar de ostentar la presidencia rotatoria, Europa no le acepta ni una sóla iniciativa, el manual europeo de instalación de los Afis, que será aprobado el próximo martes rechaza de forma tajante las intenciones del ministro de Fomento de incluir en varios aeropuertos españoles el servicio de información de vuelo en aeródromos.
Para evitar la humillación, en las negociaciones sobre el documento, España intentó eliminar la salvaguarda que cuestiona el plan de Fomento. Al no conseguirlo, se decantó por no hacer más ruido sobre este asunto para no aparecer como país perdedor. Eso sí, José Blanco puede optar por no cumplir el mandato comunitario, ya que hasta que entre en vigor el Cielo Único de la UE son los Estados los que tienen la soberanía sobre el control aéreo.
Los "Afis" (servicio de información de vuelos en los aeródromos) son un sistema automático aprobado por la Autoridad Internacional de Aviación Civil (OACI) que, supervisado por un técnico, proporciona a los pilotos la información suficiente para que ellos mismos coordinen sus aterrizajes o despegues en la pista que consideren más oportuna. El técnico da instrucciones a los pilotos en base a los parámetros que muestra el sistema.
El objetivo final del Afis es suprimir puestos de controladores aéreos y sustituirlos por este sistema.
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