El independentismo catalán y la ley

Sin duda hay un problema económico que, poniendose a ello, se puede cuantificar y acusar a los políticos de esa malversación acompañada de estafa y otras cuantas figuras penales. Pero nadie está reclamando nada al respecto. El gobierno y afines tienen la cara de utilizar el asunto económico como argumento contra el separatismo y los perros del poder les hacen el coro sin que a ninguno se le ocurra mencionar que el gobierno es responsable de esa dejación de funciones y de esas pérdidas económicas en Cataluña y en el resto e incluso les dan dinero extra para que no quiebren.

Por parte del separatismo, la malversación, la estafa y demás son tan evidentes que una justicia independiente ya habría actuado, pero ellos apelan al coste de la libertad y es cierto que cuando los paises se han separado han sufrido costes económicos importantes, pero ese ha sido el coste de la libertad y todos lo han dado por bueno.

También todos mienten. Es cierto que saldrán de la unión europea, cosa que ahora aceptan a duras penas, pero, dado que el gobierno aceptará la secesión sin muchas protestas, los europeos no van a perder una región rica tan facilmente y el tiempo en la cola será breve.

Pero además el gobierno ha actuado con mucha frivolidad al pedir al Cameron que pontifique contra la secesión, pues eso supondrá, ya que los británicos no dan nada gratis, que habrá que ceder aún más en el asunto de Gibraltar. Tenemos unas declaraciones un tanto ambíguas de algunos gobernantes y con eso pretende el gobierno asustar a los separatistas.

Tras más de treinta años de adoctrinamiento, el catalán medio entiende como deber patriótico la secesión, cueste lo que cueste, en dinero, que otra cosa sería dar su vida por la causa. Se trata de una utopía y ellos la persiguen y el gobierno se opone con razones económicas no demasiado claras, en lugar de apelar a los sentimientos y a la ley. Pero tras más de treinta años consintiendo burlarse de las leyes, ahora es imposible apelar a ellas. Pero es que tampoco es posible apelar a los sentimientos pues los gobiernos han demostrado sobradamente que los sentimientos son algo ajeno a ellos.

Nadie ha planteado qué pensarán el resto de los españoles si aceptarán que les quiten un trozo de su país y nadie ha preguntado que ocurrirá con aquellos catalanes que no aceptan la separación. Creo que son las cuestiones básicas.

La soberanía es de todo el pueblo, sobre todo el territorio, no existe soberanía de catalanes sobre Cataluña, existe soberanía de españoles sobre Cataluña. Pero esto se obvia y no se trata. ¿Y qué pasa con el valle de Arán? Ellos ni son catalanes ni quieren serlo, pero se van a encontrar como catalanes sin que nadie haga nada por evitarlo.

¿Y qué pasará con los que no quieran dejar de ser españoles? Se convertirán en catalanes refugiados, en España, como decía el impresentable ese, cuando hablaba de catalanes refugiados. Ya hubo catalanes refugiados en el 36 a los que costó tres años volver.

Aquí se trata de un asunto entre delincuentes, sin que sepamos quien lo es más y todos con un objetivo común: enriquecerse. Y cuando hablo de delincuentes, no me refiero solo a los políticos, hay también gentes de dinero detrás de esto. Dicen que tras el proceso, el Sr Mas va a salir tan escaldado que tendrá que emigrar y será colocado con un sueldo acorde a su sacrifico por estos del dinero.

Si alguien me pregunta, diré que la separación de Cataluña es un hecho, que puede tardar un poco, pero que se producirá.

Habria que ver que es más peligroso, sin un político inutil o un político bribón. Esta disyuntiva se tendria que poner en el estudio de la psicologia y psicopatia. Y como ultimo recurso en la órbita de casos paranormales y ocultismo. El pueblo español se lo traga todo.