El presidente del gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, ha reconocido que la Justicia española funciona mal, pero prometió solucionar sus problemas con un nuevo sistema informático.
La "Justicia Windows" de ZP es otra broma pesada a los ciudadanos españoles, conscientes de que el principal problema de la Justicia no su retraso informático sino la independencia, que los partidos políticos no respetan. Dotar de eficacia a una justicia dependiente y manejada por los partidos significa potenciar la arbitrariedad.
Mientras ZP hablaba de la Justicia en el programa de televisión "59 segundos", con una frivolidad democráticamente intolerable, el PSOE, su partido, y el estrambótico PP de Rajoy se reunen cada día para repartirse el poder y la influencia dentro del sistrema judicial español, deteriorando aun más la ya podrida democracia española.
La "Justicia Windows" de ZP es otra broma pesada a los ciudadanos españoles, conscientes de que el principal problema de la Justicia no su retraso informático sino la independencia, que los partidos políticos no respetan. Dotar de eficacia a una justicia dependiente y manejada por los partidos significa potenciar la arbitrariedad.
Mientras ZP hablaba de la Justicia en el programa de televisión "59 segundos", con una frivolidad democráticamente intolerable, el PSOE, su partido, y el estrambótico PP de Rajoy se reunen cada día para repartirse el poder y la influencia dentro del sistrema judicial español, deteriorando aun más la ya podrida democracia española.