La desconfianza en Pedro Sánchez es tanta que hasta se sospecha de pucherazo. En la imagen, Sánchez y su amigo, el presidente de Correos
Nadie es capaz de explicar con razones sólidas las victorias de Pedro Sánchez, ni la del 28 de Marzo, ni la del 20 de Noviembre de 2019. No puedo evitar hacer caso a la fuerte intuición de que algo sucio hay detrás de este personaje y que nada es lo que parece.
Lo que es difícil de explicar políticamente es que aparezcan bolsas de apoyos, masas de votantes nuevos a un partido político sin que haya habido un hecho claro que motive esos grandes trasvases de apoyos. Es muy fácil que alguien que apoya a un partido siga haciéndolo. Lo difícil es explicar que cambie su voto o que aparezcan votantes nuevos, y en una cantidad considerable, quizás entre los jóvenes o desde la abstención. Es muy difícil también hacer votar a un abstencionista. Y menos con un tipo como Sánchez, que no ilusiona a nadie. ¿Jóvenes ilusionados con Sánchez? No tiene sentido. En cualquier caso tiene sentido que los jóvenes se ilusionen por partidos como Podemos, Ciudadanos o VOX, en estos momentos, que son los partidos nuevos.
Nadie ha investigado ni ha sido capaz de explicar de donde salieron los apoyos a Sánchez, no solo en las elecciones, sino también dentro del propio partido. Apareció el tema del fraude con el doctorado, previo a las elecciones del 20 de Noviembre, en las que nadie decía claramente que Sánchez le convencía políticamente.
Para que Sánchez ganara las elecciones a nivel interno del partido tuvo que montar un numerito simulando que luchaba contra la gestora del partido, para poder abstenerse en la investidura del PP de Rajoy, de manos de la gestora. Y hacer como que no quería para luego presentarse como candidato y así hacer como que el PSOE se renueva.
Las encuestas de las elecciones eran muy dispares entre unos medios y otros, algunos daban victoria a la derecha.
Es como si Sánchez hubiera sacado el agua del desierto. La caradura y actitud que tiene este sujeto no inspiran ninguna confianza. A eso hay que sumar su falta de ideas políticas, y el fraude con el doctorado. No tiene ningún sentido que en este contexto aparezcan bolsas de apoyos nuevas, que le dieran la victoria. Es que no se ha visto a nadie decir que Sánchez le ha hecho votar al PSOE por primera vez, o por la razón que sea. No hay ningún argumento posible sobre la mesa para justificar ese cambio.
Si es por comparar la corrupción entre PP y PSOE, el PSOE ha robado más y de manera más ruin y destructiva. Si es por economía o empleo, cuando gobierna el PP se reduce el paro y cuando gobierna el PSOE, aumenta el paro. Para ganar el voto del ciudadano hay que hacer algo más que un discurso o que los medios de comunicación le laven la cara al partido político. Si fuera por ilusión de apoyar el cambio, habría otros cuatro partidos que cumplen mejor ese rol: VOX, C's, Más País y Podemos.
Solo por manipulación o adoctrinamiento no se logra que un ciudadano vaya a votar a un partido político. Ese partido político también tiene que hacerlo bien, tiene que demostrar algo real, tiene que haber por lo menos un espectáculo montado, como el de las balas o el del 11M, para que la gente vaya a votar PSOE. Y no hubo nada de eso. Es muy difícil entender que la gente e haya movilizado para apoyar este partido.
Por todo esto, por los números, por la adjudicación a Indra, irregular y de emergencia, del recuento electrónico y porque esta empresa está vinculada a las victoria de Chávez en Venezuela y a otras sospechas. Y porque el resultado electoral final da justo para montar gobierno con golpistas y comunistas, gente que ha recibido apoyo y entrenamiento del mismo gobierno chavista.
Por todo esto, por las maletas de Delcy, por el rescate de Plus Ultra y por otros muchos detalles, todo apunta a Venezuela, a fraude electoral, a robar y blanquear dinero del mucho que han robado. Lo recaudado con los EREs y los cursos de formación son muchos millones de euros, una cifra espeluznante, ¿Dónde está todo ese dinero robado?
Mentalmente
Lo que es difícil de explicar políticamente es que aparezcan bolsas de apoyos, masas de votantes nuevos a un partido político sin que haya habido un hecho claro que motive esos grandes trasvases de apoyos. Es muy fácil que alguien que apoya a un partido siga haciéndolo. Lo difícil es explicar que cambie su voto o que aparezcan votantes nuevos, y en una cantidad considerable, quizás entre los jóvenes o desde la abstención. Es muy difícil también hacer votar a un abstencionista. Y menos con un tipo como Sánchez, que no ilusiona a nadie. ¿Jóvenes ilusionados con Sánchez? No tiene sentido. En cualquier caso tiene sentido que los jóvenes se ilusionen por partidos como Podemos, Ciudadanos o VOX, en estos momentos, que son los partidos nuevos.
Nadie ha investigado ni ha sido capaz de explicar de donde salieron los apoyos a Sánchez, no solo en las elecciones, sino también dentro del propio partido. Apareció el tema del fraude con el doctorado, previo a las elecciones del 20 de Noviembre, en las que nadie decía claramente que Sánchez le convencía políticamente.
Para que Sánchez ganara las elecciones a nivel interno del partido tuvo que montar un numerito simulando que luchaba contra la gestora del partido, para poder abstenerse en la investidura del PP de Rajoy, de manos de la gestora. Y hacer como que no quería para luego presentarse como candidato y así hacer como que el PSOE se renueva.
Las encuestas de las elecciones eran muy dispares entre unos medios y otros, algunos daban victoria a la derecha.
Es como si Sánchez hubiera sacado el agua del desierto. La caradura y actitud que tiene este sujeto no inspiran ninguna confianza. A eso hay que sumar su falta de ideas políticas, y el fraude con el doctorado. No tiene ningún sentido que en este contexto aparezcan bolsas de apoyos nuevas, que le dieran la victoria. Es que no se ha visto a nadie decir que Sánchez le ha hecho votar al PSOE por primera vez, o por la razón que sea. No hay ningún argumento posible sobre la mesa para justificar ese cambio.
Si es por comparar la corrupción entre PP y PSOE, el PSOE ha robado más y de manera más ruin y destructiva. Si es por economía o empleo, cuando gobierna el PP se reduce el paro y cuando gobierna el PSOE, aumenta el paro. Para ganar el voto del ciudadano hay que hacer algo más que un discurso o que los medios de comunicación le laven la cara al partido político. Si fuera por ilusión de apoyar el cambio, habría otros cuatro partidos que cumplen mejor ese rol: VOX, C's, Más País y Podemos.
Solo por manipulación o adoctrinamiento no se logra que un ciudadano vaya a votar a un partido político. Ese partido político también tiene que hacerlo bien, tiene que demostrar algo real, tiene que haber por lo menos un espectáculo montado, como el de las balas o el del 11M, para que la gente vaya a votar PSOE. Y no hubo nada de eso. Es muy difícil entender que la gente e haya movilizado para apoyar este partido.
Por todo esto, por los números, por la adjudicación a Indra, irregular y de emergencia, del recuento electrónico y porque esta empresa está vinculada a las victoria de Chávez en Venezuela y a otras sospechas. Y porque el resultado electoral final da justo para montar gobierno con golpistas y comunistas, gente que ha recibido apoyo y entrenamiento del mismo gobierno chavista.
Por todo esto, por las maletas de Delcy, por el rescate de Plus Ultra y por otros muchos detalles, todo apunta a Venezuela, a fraude electoral, a robar y blanquear dinero del mucho que han robado. Lo recaudado con los EREs y los cursos de formación son muchos millones de euros, una cifra espeluznante, ¿Dónde está todo ese dinero robado?
Mentalmente