Algunos lectores de este blog han solicitado argumentos para votar en blanco porque muchos creen que ese voto no es práctico, sobre todo porque no cuenta en los computos finales y -dicen- suele beneficiar al ganador.
Nosotros creemos lo contrario: que no existe un voto más util y eficaz que el blanco.
Ahí van algunos argumentos:
El mayor mal que nos azota no es que gobierne un partido u otro, sino que el sistema está degradado, que la democracia está secuestrada por una casta política que ha abandonado la democracia auténtica y que ha abrazado una especie de dictadura democrática que ya los griegos bautizaron como oligocracia. El voto en blanco va directamente contra la línea de flotación de esa democracia degradada, sin renunciar a la democracia verdadera, reivindicándola.
Mientras votemos a la oposición para castigar al gobierno que lo ha hecho mal, seguimos alimentando el sistema, sin mejorarlo un ápice. Cuando votamos beneficiamos a todos los partidos que viven del sistema y que lo han degradado. El partido que gana obtiene como premio el gobierno, pero los otros van a la oposición, donde también existen beneficios y privilegios: dinero público para el partido, sueldos pagados por los ciudadanos, coches oficiales y participación, como cuota, en instituciones y empresas públicas o dominadas por el poder político. El voto en blanco significa una crítica al mal gobierno, a los secuestradores y depravadores de la democracia, sin renunciar a una democracia regenerada que creemos que es el mejor antídoto contra el totalitarismo.
Si creemos que el sistema democrático está degradado y prostituido por los partidos políticos y los políticos profesionales, si creemos que el mundo, que sigue siendo injusto y violento, es víctima del mal gobierno y necesita mejorar, el voto en blanco es la mejor opción porque ese voto representa un claro mensaje al sistema: "somos demócratas y queremos democracia, pero no la vuestra, la que habéis degradado y corrompido, sino una emocracia auténtica, limpia, en la que el ciudadano controle a los poderes y participe en los procesos de toma de decisiones".
Si estamos convencidos de que el ciudadano es el soberano en la democracia, un sistema que se define como "el gobierno del pueblo, por el pueblo y para el pueblo" votar en blanco es rechazar a los políticos y decirles que han corrompido el sistema, que, sin ciudadanos, sin atender permanentemente a la opinión ciudadana y sin ganarse cada día la confianza de los votantes, la democracia no existe y que lo que ellos están haciendo es apoyarse en una falsa democracia para ejercer un dominio no deseado, gozar de privilegios injustos y gobernar mal un mundo que no consiguen mejorar.
Podríamos aportar muchas mas razones y seguiremos haciéndolo en otros posts, pero es importante terminar estos argumentos afirmando que los políticos, que son plenamente conscientes de que el único voto que les hace daño y que pone en peligro su cuidado sistema de privilegios y dominio, es el voto en blanco, lo han devaluado y por eso, arbitrariamente, lo han despojado de representación.
En buena ley, en justicia y en democracia, el voto en blanco debería obtener, como cualquier otro, una representación en el Parlamento. Si los ciudadanos quieren que existan escaños vacios, ¿en base a qué criterios se les contradice?. Los votos en blanco deben estar representados en los parlamentos con escaños vacios Esos sillones vacios en las cámaras legislativas serían un testimonio palpable del rechazo ciudadano al mal gobierno, a la corrupción, a la ineficacia, al abuso del poder y a privilegios injustificados.
Nosotros creemos lo contrario: que no existe un voto más util y eficaz que el blanco.
Ahí van algunos argumentos:
El mayor mal que nos azota no es que gobierne un partido u otro, sino que el sistema está degradado, que la democracia está secuestrada por una casta política que ha abandonado la democracia auténtica y que ha abrazado una especie de dictadura democrática que ya los griegos bautizaron como oligocracia. El voto en blanco va directamente contra la línea de flotación de esa democracia degradada, sin renunciar a la democracia verdadera, reivindicándola.
Mientras votemos a la oposición para castigar al gobierno que lo ha hecho mal, seguimos alimentando el sistema, sin mejorarlo un ápice. Cuando votamos beneficiamos a todos los partidos que viven del sistema y que lo han degradado. El partido que gana obtiene como premio el gobierno, pero los otros van a la oposición, donde también existen beneficios y privilegios: dinero público para el partido, sueldos pagados por los ciudadanos, coches oficiales y participación, como cuota, en instituciones y empresas públicas o dominadas por el poder político. El voto en blanco significa una crítica al mal gobierno, a los secuestradores y depravadores de la democracia, sin renunciar a una democracia regenerada que creemos que es el mejor antídoto contra el totalitarismo.
Si creemos que el sistema democrático está degradado y prostituido por los partidos políticos y los políticos profesionales, si creemos que el mundo, que sigue siendo injusto y violento, es víctima del mal gobierno y necesita mejorar, el voto en blanco es la mejor opción porque ese voto representa un claro mensaje al sistema: "somos demócratas y queremos democracia, pero no la vuestra, la que habéis degradado y corrompido, sino una emocracia auténtica, limpia, en la que el ciudadano controle a los poderes y participe en los procesos de toma de decisiones".
Si estamos convencidos de que el ciudadano es el soberano en la democracia, un sistema que se define como "el gobierno del pueblo, por el pueblo y para el pueblo" votar en blanco es rechazar a los políticos y decirles que han corrompido el sistema, que, sin ciudadanos, sin atender permanentemente a la opinión ciudadana y sin ganarse cada día la confianza de los votantes, la democracia no existe y que lo que ellos están haciendo es apoyarse en una falsa democracia para ejercer un dominio no deseado, gozar de privilegios injustos y gobernar mal un mundo que no consiguen mejorar.
Podríamos aportar muchas mas razones y seguiremos haciéndolo en otros posts, pero es importante terminar estos argumentos afirmando que los políticos, que son plenamente conscientes de que el único voto que les hace daño y que pone en peligro su cuidado sistema de privilegios y dominio, es el voto en blanco, lo han devaluado y por eso, arbitrariamente, lo han despojado de representación.
En buena ley, en justicia y en democracia, el voto en blanco debería obtener, como cualquier otro, una representación en el Parlamento. Si los ciudadanos quieren que existan escaños vacios, ¿en base a qué criterios se les contradice?. Los votos en blanco deben estar representados en los parlamentos con escaños vacios Esos sillones vacios en las cámaras legislativas serían un testimonio palpable del rechazo ciudadano al mal gobierno, a la corrupción, a la ineficacia, al abuso del poder y a privilegios injustificados.