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MAYORÍA ABSOLUTA DE HAMAS





Los “Cuatro”, la ONU, Rusia, EE.UU. y la UE manifiestan, desde Londres, que "el Gobierno Palestino debe renunciar a la violencia y aceptar los acuerdos y obligaciones previas”, como premisa para continuar recibiendo la financiación del "desarrollo económico e institucional" de la ANP. El movimiento islamista, habiendo ganado por mayoría absoluta las elecciones palestinas, ha rechazado las condiciones impuestas; se niega a reconocer a Israel y desarmar a sus huestes, so pretexto de que las exigencias de la comunidad internacional sólo están al "servicio de los intereses de Israel", por lo que no admite dictados de nadie, para recibir su ayuda. "El asunto primordial es la ocupación israelí y no su elección democrática”, dice Hamas, un grupo terrorista que ha perpetrado unos sesenta atentados. Sólo promete respetar el proceso de paz "en concordancia con el derecho internacional".

El Gobierno de Israel ha congelado las transferencias a la ANP de 55 millones de dólares mensuales, generadas por los impuestos y aranceles que recauda de trabajadores palestinos y las tasas de aduanas por productos destinados a los territorios ocupados que entran a través de puertos israelíes, según establecen los acuerdos de Oslo de 1993, y su correlato económico, los pactos de París.Y ha pedido a la comunidad internacional que interrumpa la aportación de nuevos fondos a Palestina, aunque asegura que la ayuda humanitaria continuará: "no tenemos la menor intención de afectar las necesidades humanitarias de la población palestina y la seguiremos atendiendo en Cisjordania y Gaza". Analistas locales advierten que la perspectiva de que los casi 60.000 policías palestinos no perciban sus salarios podría provocar el colapso absoluto de la entidad. Aún no se ha prohibido el tránsito a Israel de trabajadores palestinos, pero el Gobierno Israelí ha adoptado medidas que prohíben a personalidades y legisladores de Hamas, que son mayoría en el Parlamento palestino, pasar de la franja de Gaza a su sede en Ramala, a través de suelo israelí. El primer ministro israelí, Ehud Olmert, ha declarado que la entrada de Hamas en el Parlamento de Gaza ha convertido la ANP "en una entidad terrorista". 'Nosotros, añadía, estamos por dos estados, uno israelí y otro palestino' para resolver el conflicto entre ambos pueblos, pero "Israel no aceptará un gobierno de Hamas; "Israel no se reconciliará con el terrorismo y seguirá combatiéndolo con todo su poderío; no mantendrá relaciones, con un Gobierno, en el que figure Hamas, que aspira a destruir el Estado Judío".

Por su parte, Hamas ha nombrado a Ismail Haniya, primer ministro del Gobierno. El presidente de la ANP, Abú Mazen, ha pedido a Hamas que negocie con Israel y respete los acuerdos firmados por la ANP que han permitido, al pueblo palestino, caminar hacia su propio Estado. Un portavoz de Hamas, en respuesta, rechazó de forma categórica la posibilidad de entablar diálogo con Tel Aviv para concretar la paz.

La secretaria de Estado norteamericana, Condoleezza Rice, ha afirmado en El Cairo que Hamas debe elegir, "no puede tener un pie en el campo del terrorismo y otro en el de la política, la comunidad internacional espera que el movimiento palestino cumpla las condiciones, en particular, la búsqueda de la paz y el respeto de los acuerdos firmados con Israel". "No pueden alcanzar la paz si no reconocen el derecho de Israel a existir y la necesidad de renunciar al terrorismo".

Con el odio y la fanática violencia del terror, no se llega más que al abismo infernal. No dejan resquicio alguno a la luz de la concordia y la convivencia.


Camilo Valverde Mudarra

Franky  
Sábado, 4 de Marzo 2006
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