Sánchez también coloniza la agencia EFE y recoloca allí, como presidente, a su exsecretario de Comunicación.
EFE es demasiado importante para que un presidente corrupto le ponga el yugo y la esclavice.
El nombramiento, ampliamente criticado, pone en peligro la posición de EFE en el mundo y ha provocado un serio varapalo del periódico “El País”, el más seguido por la izquierda española.
Trabajé durante 12 años en EFE, donde empecé de becario en 1973 y terminé de director en 1985, cuando acepte el cargo de director de comunicación de la Expo92. Fui corresponsal en México, jefe de la oficina en Cuba, director del área de Centroamérica (Panamá, Costa Rica, Nicaragua, Honduras, El Salvador y Guatemala), director de EFE en Italia y director comercial y de informativos en la Central de Madrid. En EFE aprendí periodismo competitivo y alimenté mi orgullo de ser español, defendiendo la influencia de España en el mundo de la información. Por eso, la colonización de EFE por un dictador me duele y me subleva.
La agencia EFE ha sido, durante décadas, un poderoso instrumento de influencia española en el mundo, más potente que la red de instituto Cervantes y quizás que muchas embajadas. En mis tiempos, EFE competía con las agencias anglosajonas Reuter, UPI y AP y las derrotaba en algunos países, sobre todo en América.
Hoy, colonizada por los políticos y convertida en un vector hortera de propaganda, sin veracidad ni solvencia ética, la agencia se hundirá y llegará a ser insignificante.
El loco Sánchez preferirá siempre una EFE esclava que una EFE fuerte e independiente.
"Hará de EFE lo mismo que ha hecho del CIS" tras la elección como presidente del "encargado de la propaganda del Gobierno", en referencia al exsecretario de Estado de Comunicación. "Ni una institución sin asaltar, como para entregarles el CGPJ", ha espetado también en redes sociales Cayetana Álvarez de Toledo, portavoz adjunta del PP en el Consejo de los Diputados.
Gabilondo como Defensor del Pueblo y Magdalena Valerio, ministra de Trabajo de aquel gabinete, se convirtió en presidenta del Consejo de Estado, aunque el Tribunal Supremo acaba de tumbar el nombramiento por el incumplimiento de uno de sus requisitos, el de ser jurista de "reconocido prestigio".
Magdalena Valerio, ministra de Trabajo de aquel gabinete, se convirtió en presidenta del Consejo de Estado, aunque el Tribunal Supremo acaba de tumbar el nombramiento por el incumplimiento de uno de sus requisitos, el de ser jurista de "reconocido prestigio".
Para los que hemos sido soldados en EFE y luchado allí en las trincheras de la información mundial, la esclavitud que le impone el sanchismo es insultante y dolorosa.
Gracias a la independencia y profesionalidad de muchos periodistas españoles, EFE llegó a ser un músculo eficaz e influyente que contaba la historia diaria del mundo en idioma español y con el punto de vista de España, hoy, sometida a Sánchez, solo será una fuente de mentiras y estafas, como es el mismo presidente del gobierno español.
Francisco Rubiales
EFE es demasiado importante para que un presidente corrupto le ponga el yugo y la esclavice.
El nombramiento, ampliamente criticado, pone en peligro la posición de EFE en el mundo y ha provocado un serio varapalo del periódico “El País”, el más seguido por la izquierda española.
Trabajé durante 12 años en EFE, donde empecé de becario en 1973 y terminé de director en 1985, cuando acepte el cargo de director de comunicación de la Expo92. Fui corresponsal en México, jefe de la oficina en Cuba, director del área de Centroamérica (Panamá, Costa Rica, Nicaragua, Honduras, El Salvador y Guatemala), director de EFE en Italia y director comercial y de informativos en la Central de Madrid. En EFE aprendí periodismo competitivo y alimenté mi orgullo de ser español, defendiendo la influencia de España en el mundo de la información. Por eso, la colonización de EFE por un dictador me duele y me subleva.
La agencia EFE ha sido, durante décadas, un poderoso instrumento de influencia española en el mundo, más potente que la red de instituto Cervantes y quizás que muchas embajadas. En mis tiempos, EFE competía con las agencias anglosajonas Reuter, UPI y AP y las derrotaba en algunos países, sobre todo en América.
Hoy, colonizada por los políticos y convertida en un vector hortera de propaganda, sin veracidad ni solvencia ética, la agencia se hundirá y llegará a ser insignificante.
El loco Sánchez preferirá siempre una EFE esclava que una EFE fuerte e independiente.
"Hará de EFE lo mismo que ha hecho del CIS" tras la elección como presidente del "encargado de la propaganda del Gobierno", en referencia al exsecretario de Estado de Comunicación. "Ni una institución sin asaltar, como para entregarles el CGPJ", ha espetado también en redes sociales Cayetana Álvarez de Toledo, portavoz adjunta del PP en el Consejo de los Diputados.
Gabilondo como Defensor del Pueblo y Magdalena Valerio, ministra de Trabajo de aquel gabinete, se convirtió en presidenta del Consejo de Estado, aunque el Tribunal Supremo acaba de tumbar el nombramiento por el incumplimiento de uno de sus requisitos, el de ser jurista de "reconocido prestigio".
Magdalena Valerio, ministra de Trabajo de aquel gabinete, se convirtió en presidenta del Consejo de Estado, aunque el Tribunal Supremo acaba de tumbar el nombramiento por el incumplimiento de uno de sus requisitos, el de ser jurista de "reconocido prestigio".
Para los que hemos sido soldados en EFE y luchado allí en las trincheras de la información mundial, la esclavitud que le impone el sanchismo es insultante y dolorosa.
Gracias a la independencia y profesionalidad de muchos periodistas españoles, EFE llegó a ser un músculo eficaz e influyente que contaba la historia diaria del mundo en idioma español y con el punto de vista de España, hoy, sometida a Sánchez, solo será una fuente de mentiras y estafas, como es el mismo presidente del gobierno español.
Francisco Rubiales