Desde que en 1989 cayó el Muro de Berlín y se desmoronó el mundo comunista, el poder mundial tuvo a los Estados Unidos como único dueño. Hoy, algunas grandes potencias comunistas del pasado, como China y Rusia, renacen, se alían con otras potencias emergentes y se atreven ya a plantar cara al dominante poderío americano. El mundo camina hacia la bipolaridad y pronto volverá a ser dual.
Por primera vez en 25 años, el liderazgo mundial está en disputa y el poder hegemónico de Estados Unidos está siendo cuestionado en una contienda múltiple que se despliega en varios escenarios, desde el militar al económico, sin olvidar el la propaganda, la influencia, la alianza con las potencias emergentes, los sistema de producción, la gestión del poder político, la religión y el control de las fuentes de energía, las materias primas y los mercados.
Las primeras batallas por el control del mundo ya se están librando y las dos principales son la de Ucrania, en el plano político y militar, y la del precio del petroleo, una operación de estretegia económica mediante la cual Estados Unidos, ayudados por Arabia y otros aliados del oriente próximo, pretenden estrangular la economía de Rusia, principal rival de Estados Unidos en el plano militar.
Brasil, Rusia, China, la India y Sudáfrica, cinco gigantes que juntos congregan casi la mitad de la población del mundo y que son conocidos como los "BRICS" (primera letra de cada nación) están estrechando sus vínculos y se disponen a crear un Banco Mundial de desarrollo para apoyar sus respectivos programas de crecimiento y operaciones de mercado, lo que constituye todo un desafío al Banco Mundial y a las estructuras del poder económico, hasta ahora dominadas por los anglosajones.
En el grupo de los BRICS, el papel económico de China, que ya es la primera economía del mundo, es crucial, mientras que a Rusia le toca garantizar el poder militar, ya que cuenta con una cantidad de ojivas nucleares suficientes para destruir el planeta cuatro o cinco veces. La India, con mas de mil millones de habitantes y una economía productiva bien desarrollada y con amplio futuro, es, junto con China, una fuerza económica impresionante y todo un mercado dispuesto a ser conquistado.
La fuerza de los BRICS es real y en la actualidad constituye para los Estados Unidos un desafío mas potente que el que representaba la antigua URSS y todos sus aliados en tiempos de Breznev o Andropov.
Hoy vuelve a ocurrir como en el pasado, cuando la URSS era el contrapoder mundial, y muchos paises del planeta empiezan a interrogarse con que bloque les conviene cerrar alianzas estratégicas. La lucha por los mercados es especialmente dura y se concentra en trtes escenarios: África, América Latina y Asia. África es otro territorio en disputa y ahí la gran apuesta es de China. Europa parece destinada a ser aliada de Estados Unidos, pero algunos empiezan a dudar y a coquetear con China y Rusia.
En el mundo musulmán la batalla es de una dureza terrible y está frecuentemente regada con sangre. Las recientes revueltas de la primavera árabe, con episodios en Libia, Egipto, Tunez, Siria y otros países, y el auge de un terrorismo que nadie sabe de donde recibe su generosa financiación, plasmado en Al Queda y en el salvaje Estado Islámico, son las manifestaciones visibles de una batalla que se libra en los palacios de los reyes, jeques y sultanes, en las arenas del desierto, en las tribus religiosas de suníes y chiíes y en los suculentos campos petrolíferos.
Algunos expertos creen que el peligro de una guerra atómica devastadora es ahora mas alto que en tiempos de la vieja Guerra Fría, cuando el mundo se despertaba cada mañana dando gracias al cielo porque los misiles no habían emprendido todavía el vuelo.
Por primera vez en 25 años, el liderazgo mundial está en disputa y el poder hegemónico de Estados Unidos está siendo cuestionado en una contienda múltiple que se despliega en varios escenarios, desde el militar al económico, sin olvidar el la propaganda, la influencia, la alianza con las potencias emergentes, los sistema de producción, la gestión del poder político, la religión y el control de las fuentes de energía, las materias primas y los mercados.
Las primeras batallas por el control del mundo ya se están librando y las dos principales son la de Ucrania, en el plano político y militar, y la del precio del petroleo, una operación de estretegia económica mediante la cual Estados Unidos, ayudados por Arabia y otros aliados del oriente próximo, pretenden estrangular la economía de Rusia, principal rival de Estados Unidos en el plano militar.
Brasil, Rusia, China, la India y Sudáfrica, cinco gigantes que juntos congregan casi la mitad de la población del mundo y que son conocidos como los "BRICS" (primera letra de cada nación) están estrechando sus vínculos y se disponen a crear un Banco Mundial de desarrollo para apoyar sus respectivos programas de crecimiento y operaciones de mercado, lo que constituye todo un desafío al Banco Mundial y a las estructuras del poder económico, hasta ahora dominadas por los anglosajones.
En el grupo de los BRICS, el papel económico de China, que ya es la primera economía del mundo, es crucial, mientras que a Rusia le toca garantizar el poder militar, ya que cuenta con una cantidad de ojivas nucleares suficientes para destruir el planeta cuatro o cinco veces. La India, con mas de mil millones de habitantes y una economía productiva bien desarrollada y con amplio futuro, es, junto con China, una fuerza económica impresionante y todo un mercado dispuesto a ser conquistado.
La fuerza de los BRICS es real y en la actualidad constituye para los Estados Unidos un desafío mas potente que el que representaba la antigua URSS y todos sus aliados en tiempos de Breznev o Andropov.
Hoy vuelve a ocurrir como en el pasado, cuando la URSS era el contrapoder mundial, y muchos paises del planeta empiezan a interrogarse con que bloque les conviene cerrar alianzas estratégicas. La lucha por los mercados es especialmente dura y se concentra en trtes escenarios: África, América Latina y Asia. África es otro territorio en disputa y ahí la gran apuesta es de China. Europa parece destinada a ser aliada de Estados Unidos, pero algunos empiezan a dudar y a coquetear con China y Rusia.
En el mundo musulmán la batalla es de una dureza terrible y está frecuentemente regada con sangre. Las recientes revueltas de la primavera árabe, con episodios en Libia, Egipto, Tunez, Siria y otros países, y el auge de un terrorismo que nadie sabe de donde recibe su generosa financiación, plasmado en Al Queda y en el salvaje Estado Islámico, son las manifestaciones visibles de una batalla que se libra en los palacios de los reyes, jeques y sultanes, en las arenas del desierto, en las tribus religiosas de suníes y chiíes y en los suculentos campos petrolíferos.
Algunos expertos creen que el peligro de una guerra atómica devastadora es ahora mas alto que en tiempos de la vieja Guerra Fría, cuando el mundo se despertaba cada mañana dando gracias al cielo porque los misiles no habían emprendido todavía el vuelo.
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